Parada Cardiaca. Desfibriladores

Primeros Auxilios. Parada cardiaca y Desfibriladores

Ante un paro cardiaco el actuar con urgencia es vital, a partir de los cinco minutos las posibilidades de sacar con vida a la persona disminuyen notablemente. Estar entrenado en maniobras de resucitación cardiopulmonar es un plus que muchos trabajadores auspiciados por el interés de sus empresas y empresarios aprenden y que en algún momento podrían aplicar.

No obstante desde ya hace algunos años todo el mundo conoce la existencia de los desfibriladores automáticos o semiautomáticos y su empleo ante un ataque cardiaco, aparatos que debían estar colocados de forma visible y ostensible en lugares donde confluyen importantes colectivos de personas, lugares públicos, salas de teatro, cine, campos de futbol o centros deportivos o simplemente en las calles de las diferentes ciudades.

Desgraciadamente en España el número de estos aparatos que pueden salvar muchas vidas, son escasos una vez más la desafortunada gestión/legislación  de las tan traídas y llevadas transferencias a las comunidades nos sitúan a la cola de los países en esta cuestión 10.000 desfibriladores en España (dos por cada cien mil habitantes) frente a los 50.000 en Reino Unido, 80.000 en Alemania o 100,000 en Francia. Se aduce que se precisaría cursos de formación para su empleo y  otras excusas cuando en realidad estos aparatos solo funcionan si hay una parada del corazón y ellos mismos te van indicando qué hacer en cada momento.

Solo el dato escalofriante de la muerte de 30.000 cada año por parada cardiaca sería más que suficiente para aumentar sensiblemente el arsenal de estos desfibriladores en nuestro país