La continuidad asistencial del hospital al domicilio del paciente con EPOC reduce un 30% los reingresos

No toca decir si un paciente es de Atención Primaria o de especializada, sino que necesita una integración de todos los medios disponibles del sistema.

La continuidad asistencial del hospital al domicilio del paciente con EPOC reduce un 30% los reingresos, ha afirmado el neumólogo del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid, Felipe Villar, en el II Foro EPOC de las Sociedades Científicas ‘Compartiendo experiencias en EPOC’, realizado por Neumomadrid, Sociedad de Enfermería Madrileña de Atención Primaria (SEMAP), Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) Madrid, Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y Sociedad Madrileña de Medicina de Familia y Comunitaria (SOMAMFyC).

«Es fundamental que la enfermera domiciliaria ya conozca al paciente desde que está hospitalizado, ya que así puede comparar la evolución», ha explicado Villar, durante el encuentro en el que también se han analizado las experiencias integrales de asistencia, dirigidas a mejorar la calidad de vida del paciente y a evitar las visitas a Urgencias.

Según ha afirmado el miembro del comité organizador representante de Neumomadrid, el Dr. Germán Peces-Barba, ya no toca decir si un paciente es de Atención Primaria o de especializada, sino que necesita una integración de todos los medios disponibles del sistema.

«En este punto es fundamental el papel de la enfermería de enlace, que sirve para unir y coordinar los dos niveles asistenciales para hacer posible la atención a este tipo de paciente más crítico», ha apostillado.

La EPOC provoca cada año 18.000 muertes en España y consume el 2% del presupuesto de la sanidad pública española, que supone un gasto de 3.000 millones al año, el 0,2% del PIB, según datos del estudio ‘EPI-SCAN’.

Por su parte, el coordinador del grupo de trabajo de Respiratorio en SEMG Madrid, el Dr. Francisco José Sáez, ha destacado el protocolo de Atención al Paciente Crónico que se está llevando a cabo en la Comunidad de Madrid, que apuesta por la atención domiciliaria para aumentar la calidad de vida del paciente con EPOC, en aras de que sea lo más autónomo posible, y que evita las constantes visitas del paciente a Urgencias.

El presidente de SEMERGEN Madrid, el Dr. Alfredo Avellaneda Fernández, ha dicho que el equipo de Atención Primaria es clave, ya que conoce al paciente a lo largo de su vida y antes de llegar a la hospitalización, y ha recordado que hay pacientes que reciben llamadas telefónicas diarias por parte de la enfermera, o se fijan cuidados programados por el médico una vez al mes.

«Además, el médico de Atención Primaria, ante un paciente agudizado o que presenta síntomas de empeoramiento, realiza teleconsultas con el neumólogo, para decidir si modifican el tratamiento o si el paciente debe ingresar en el hospital o podría realizar rehabilitación en el hospital de día», ha concluido.

Los pacientes con EPOC se agudizan más y con mayor intensidad durante el tiempo invernal con climas, frios y húmedos de ahí que precisen mayor asistencia tanto a nivel de consultas extermas como a nivel domiciliario.

Por otra parte es conveniente evitar sitios donde se dan afluencias masivas , salas de espera de consultorios , ambulatorios y centros de salud, por la fácil contagiosidad a través de toses y estornudos de virus respiratorios.

Desde nuestra consulta en Gijón atendemos a pacientes con patologias respiratorias , si precisa una consulta , puede llamar al 985130506 entre las 8 y las 15 horas.

 

 

Los Omeprazoles

Los inhibidores de la bomba de protones (PPI, por sus siglas en inglés) son los medicamentos más eficaces que existen para el tratamiento del reflujo ácido crónico (enfermedad de reflujo gastroesofágico o ERGE) y de la úlcera péptica. Su funcionamiento consiste en bloquear la producción de ácido estomacal, puesto que mucha cantidad de éste puede provocar una sensación de ardor en el pecho o la garganta (acidez estomacal), además de brindar al tejido esofágico dañado la oportunidad de sanar.

Los inhibidores de la bomba de protones pueden presentarse con potencia de prescripción y de no prescripción. Lo más común es tomar estos medicamentos en forma de pastilla, una vez al día y normalmente alrededor de una hora antes del desayuno. Los inhibidores de la bomba de protones generalmente son seguros cuando se toman según las instrucciones, pero al igual que todos los medicamentos, también conllevan posibles riesgos.

El consumo a largo plazo de los inhibidores de la bomba de protones se ha vinculado con mayor riesgo de infecciones, tales como neumonía y un tipo de diarrea asociado a los antibióticos y producto de la bacteria Clostridium difficile (C. difficile). Sin embargo, no se ha comprobado si los inhibidores de la bomba de protones son los responsables directos de esto.

Un reciente estudio realizado por los médicos de Mayo Clinic descubrió que con el transcurso del tiempo, los inhibidores de la bomba de protones puede cambiar el ambiente intestinal porque reducen la diversidad de las bacterias inocuas (microbioma) que normalmente habitan en el intestino. Estas bacterias ayudan a digerir la comida, absorber las vitaminas y realizar otras funciones corporales sanas.

Perder la diversidad bacteriana puede facilitar la multiplicación de microbios menos favorables, como el  C. difficile, y provocar una infección. Cuando se toma antibióticos a menudo y también se requiere tratamiento para los síntomas de reflujo, recurrir a otro tipo de antiácido —como el antagonista de la histamina (H-2)— puede reducir el riesgo de diarrea. Conocer el historial de salud permitirá al médico tomar la mejor decisión respecto a la necesidad de administrar un inhibidor de la bomba de protones y durante cuánto tiempo.

La menor cantidad de ácido estomacal también puede hacer más difícil para el cuerpo absorber nutrientes como el magnesio, el hierro, la vitamina B12 y el calcio.

Las pruebas sugieren que entre los ancianos, existe una vinculación entre el consumo del inhibidor de la bomba de protones y mayor riesgo para fracturas óseas, aunque esto normalmente ocurre en quienes ya corren más riesgo debido a otras afecciones. En muchos casos, un suplemento puede permitir corregir las deficiencias nutritivas. (Adaptado de  Mayo Clinic Health Letter).